EL EVANGELIO DEL REINO VERSUS EL EVANGELIO DEL MIEDO.

Sabemos que existe un sólo Evangelio, como lo enseña el apóstol Pablo en la carta que escribió a los Gálatas, cuando dijo:

"Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que los llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente.

No que haya otro, sino que hay algunos que os pertuban y quieren pervertir el evangelio de Cristo.

Más si aún de nosotros, o un ángel de cielo os anuciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.

Como antes hemos dicho, tambien ahora lo repito:

Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.

Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres o el de Dios? ¿o trato de agradar a los hombres?

Pues, si todavía agradar a los hombres, no sería siervo de Cristo." (Gálatas 1:6-10).

De manera, pues, que el evangelio anunciado por los apóstoles, es el único evangelio, y es la base de nuestra fe (Efesios 2:20); cuyas palabras se encuentran fielmente registradas en la Biblia Reina-Valera 1569 hasta la versión 1960, y la King James 1611 para la lengua inglesa, y demás traducciones a otras lenguas basadas en estas dos versiones. Esto lo digo para no entrar en detalles.

De manera, que debemos confiar plenamente en estas versiones, porque Dios tiene pleno control de sus palabras que puso en nuestras manos.

Y debemos entender que Satanás actuaría para poner dudas en nuestras mentes para crear desconfianza en la Santa Palabra de Dios, y así crear nuevas versiones para basar falsas enseñanzas y cambiar en evangelio verdadero.

Cuando los mutiladores del evangelio no consiguen apoyo en la Biblia, entonces, lo que hacen es objetar la misma, diciendo que fue mal traducida en tales y tales versículos.

Por eso siempre han surgidos diferentes evangelio, como son por nombrar algunos: el evangelio de la idolatría, abanderada por la Iglesia Católica; el evangelio según el espiritismo de Allan Kardec; el evangelio de la prosperidad, de algunas congregaciones evangélicas en todo el mundo; el evangelio de los Mormones; el evangelio de la Adventistas del séptimo día, el evangelio de los sólo Jesús, según la Iglesia Pentecostal Unida, el evangelio de los Russelista, presidida por la WatchTower, los falsamente llamados testigos de Jehová; y el evangelio socialista de Hugo Chávez, con su propia oración transformada del Padre Nuestro; y el evangelio del miedo, propagado por la mayoría de las congregaciones evangélicas, y de la cual me referiré específicamente en esta enseñanza.

EL EVANGELIO DEL MIEDO.

Este evangelio del miedo, enseña que todo el que no sea RAPTADO POR DIOS antes de la manifestación del anticristo se perderán, porque no podrá resistir a la gran tribulación que vendrá, y que por ende, se dejará marcar para no morir.

Y llegan hasta el punto de enseñar, que si quieren salvar su vidas en medio de la tribulación de aquellos días, deberán dejarse decapitar para salvar sus almas; es decir, que en este caso, la propia sangre del pecador tendrá el poder de pagar sus culpas, contradiciendo el Evangelio de Reino que nos enseña que sólo a través de la sangre de Cristo hay salvación.

Los que propagan esta enseñanza, sugestionan a las almas incautas para que crean que sólo aceptando pertenecer a su religion, creyendo en Jesús, podrán irse en el rapto secreto, que los librará, segun ellos, de la manifestación del anticristo que traerá el tiempo de la gran tribulación. Algo parecido a la Segunda Guerra Mundial, donde los judios fueron atribulados y asesinados en el holocausto.

Ahora, pregunto:

¿Nuestro Señor Jesucristo y los apóstoles enseñaron que debamos temerle que el hombre nos pueda matar?

Respuesta: No.

Jesús nos enseñó que no debemos temer a los que matan el cuerpo, más el alma no podrán matar, porque al único que debemos temer es a Dios, quien tiene el poder de salvar. (Mateo 10:28-33).

Sadrad, Mesac y Abetnego, no le temieron al rey Nabucodonosor, quien los amenazó con echarlos al horno de fuego. Los cuales fueron librados de sus manos en medio del fuego. Porque Dios guarda a los que le aman y le sirven, en medio de la tribulacion.

Así que esta gente que propaga el evangelio del miedo, no pueden comprender el Evangelio del reino que es espiritual.

El evangelio que ellos predican procura salvar la carne, por lo cual es carnal.

Por eso Pablo escribió en Romanos 8:35-39:

35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?

36 Como está escrito:
Por causa de ti somos muertos todo el tiempo;
Somos contados como ovejas de matadero.

37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.

38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,

39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

El Evangelio es poder de Dios para la salvación a todo aquel que cree. Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: El justo por la fe vivirá. (Romanos 1:16-17).

#EscogidosParaVencer.